HOTEL K-SAR PALACE

( Leh )

     Cuando Ladakh se abrió al exterior en 1974 el hotel K-Sar Palace fue, en 1.978, uno de los pioneros en acoger a todos aquellos que querían aventurarse por este recóndito y sorprendente rincón de la India. Plasmó en su estructura exterior la impronta de las casas ladakhis. Se nota el paso del tiempo y necesitaría unas reformas pero la verdad es que casi todos los hoteles (excepto los de gran lujo) están iguales en Leh porque la temporada alta tan solo dura dos meses. Sin embargo, las habitaciones que dan al este, la terraza superior y el jardín ofrecen un espectáculo soberbio: los majestuosos picos nevados himalayos por un lado y por otro, los reales y sagrados aposentos de reyes y budas imperturbables de su palacio y monasterio que se yerguen en lo alto de la ciudad. Unas vistas insuoperables.

Dispone de 40 habitaciones y la mitad tienen vistas al Himalaya. Su restaurante prepara platos ladakhis, tibetanos, indios y chinos. Es de los pocos que tienen parquing y un gran jardín abierto con vistas únicas.

La agencia Monalisa -a la que pertenece el hotel- se hace cargo de los trámites para obtener los permisos que nos facilitan el acceso a las zonas recientemente abiertas. También organizan trekkings y facilitan jeeps con conductores-guías para visitar los gompas (monasterios) o cualquier valle de Ladakh.

Precios. La temporada alta es muy breve y todos los alojamientos de Leh son caros, fuera de temporada se pueden obtener descuentos muy sustanciosos. En el caso del K-Sar Palace las dobles (en temporada alta) cuestan 2.300 rupias (9.000 pts.=50 US$). Existe la posibilidad de acampar por precios económicos que hay que negociar.

Para reservas:

Tlfnos en Ladakh: 91-1982-52348, 53108, 52281

Fax: 91-1982-52735

Tlfnos en Delhi: 6461027 / 6476452 / 6476453

Fax: 6426248

E-mail: matin.chunka@gems.vsnl.net


Hotel K-Sar Palace.
Cuando Ladakh se abrió al exterior en 1974 el hotel K-Sar Palace fue, en 1.978, uno de los pioneros en acoger a todos aquellos que querían aventurarse por este recóndito y sorprendente rincón de la India. Plasmó en su estructura exterior la impronta de las casas ladakhis.


Hotel K-Sar Palace. Desde su jardín y terraza se disfruta de las vistas directas sobre el Palacio Real y el gompa que se yerguen en lo alto de la ciudad.


Hotel K-Sar Palace. La mitad de sus habitaciones también tienen el privilegio de las grandes vistas con el majestuoso espectáculo de la vegetación de este increíble oasis así como de los soberbios picos nevados del Himalaya.